miércoles, 22 de mayo de 2013

Manzanilla, por favor





A buen entendedor pocas palabras bastan, pero aquellos que hayan dejado llevar su mente y paladar hasta la sanluqueña, sólo aclarar que la nuestra es del Puerto del Saúco, lugar de la Serranía de Ronda ( Ronda La Vieja) cuna de una parte de mis antepasados más recientes. Durante los últimos cuarenta años se ha estado manteniendo la semilla gracias al tesón y la pasión de unos pocos como mis tíos y mi padre. Por nuestra parte llevamos doce años con ella y nunca falla.

Manzanilla en flor, abril 2013

Este cultivo de Manzanilla o camomila, forma parte de nuestras pequeñas inmersiones en el mundo de la permacultura, como decía antes lleva doce años en el mismo sitio y ningún año nos ha faltado ni fallado, simplemente la dejamos y todos los años nos sorprende con su esplendorosa floración y aromas, a decir verdad es uno de mis cultivos preferidos (bueno cultivar la cultivo poco, por aquello de la permacultura). En cualquier caso para nosotros es todo un lujo tenerla y por eso la miramos y la mimamos como a cualquier componente de la familia, ya sea animal, vegetal o humano. Os dejo con una foto de la recolección para su secado natural y posterior conservación y consumo. Generalmente las cosechamos a la hora de más sol, las vamos ordeñando para obtener sólo flor, proceso que se repite a lo largo de quince días aproximadamente. Después las dejamos secar a la sombra y en lugar fresco con algo de corriente de aire, normalmente en talega de algodón, pero cuando le pilla llena de pan usamos alguna bolsa de papel natural. Tras esto, esperaremos al año siguiente con la ilusión que nos provoca esta Manzanilla.

Mayo 2013

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